viernes, 16 de julio de 2004

A propósito de lo que venía diciendo acerca de la naturaleza simbólica de las cosas, un amigo arrima un texto de Lewis:
 

"La palabra ´creación´ aplicada a la humana paternidad artística, me parece que resulta engañadora. Lo que nosotros hacemos es re-acomodar elementos que Él (el Creador, Dios) ha suministrado. No hay vestigio en nosotros de real creatividad 'de novo'. Tratemos de imaginar un color primario nuevo, o un tercer sexo, o una cuarta dimensión, o incluso un monstruo que no consista sino en fragmentos de animales  existentes pegados entre sí. Nada de esto sucede.
 
Y ésta es la razón por la cual nuestras obras nunca significan para los demás exactamente lo mismo que nosotros pretendíamos: porque nosotros estamos recombinando elementos hechos por Él y que ya contenían Su significado. A causa de estos significados divinos en nuestros materiales, es imposible que conozcamos completamente el significado de nuestras propias obras, ni que el significado que pretendemos sea el mejor o el más verdadero. Escribir un libro se parece mucho menos a crear que a plantar un jardín o criar a un niño: en todos estos casos, lo que hacemos nosotros es tan sólo entrar como 'una' causa más en una corriente causal que, por decirlo así, trabaja en su propia línea."
(Letters, 20/2/1943)