lunes, 28 de marzo de 2016

Abril nuestro


Tu luz me trae abril: fresnos dorados
y un aroma infinito, tibiamente
dorado en la dulzura de tu frente
y en tus ojos de otoño sosegados.

Y seremos abril todo en presente.
Lo sé porque ya están enamorados
los días que vendrán de ti aromados, 

y dan al corazón tu voz vertiente. 
Nuestro es abril, porque en su tiempo es cuando
tan silenciosamente irás sembrando
la luz que es tuya en esta sombra mía.
Y ya era nuestro abril cuando venía
todo en su viento de oro, madurando
el gozo amante que nos prometía.