jueves, 18 de diciembre de 2003

Égloga concreta que sustenta la abstracta belleza de las cosas,
para el místico Doctor San Juan de la Cruz


Tú que engendras rebaños de húmedas llanuras
Y cálamos sonoros de bosques y de vientos,
Pastor de efigies tenues y clarísimas nubes,
La arboreidad de sombras emanan en tu canto;
Y un corazón antiguo de noches y de días
Solloza en el amor de los graves balidos.
Una nueva substancia renueva la substancia
De la flor o la mente,
La emanación, el sueño, la vigilia,
La grandeza del mínimo, la lucidez, el fuego.
Del corazón antiguo de noches y de días
Sollozan el amor de los graves balidos.
Quien golpea la tierra, llama temor la muerte,
Simulacros tan densos como piedras eternas.
Tu bondad nos responde en las cañas agrestes,
Tú que ingenias rebaños
De la luz en la nube de la muerte.



Jacobo Fijman