Coplitas de tiempo y sal
No sé dónde van los días
que aquí no están y no son.
Si lo supiera, sabría.
Pero no tengo ese don.
¿Dónde van las horas largas
y las que pasan volando?
¿Podré endulzar las amargas?
¿Podré borrarlas cantando?
No sé dónde van los años,
ni dónde los mesen van.
¿Con ellos se irán los daños,
las penas y desengaños?
¿O nunca jamás se irán?
Que lo que fue no haga mal,
como a aquella le pasó
que la mirada volvió
y así se volvió de sal.
Coplita del tiempo ido:
custodiame lo pasado
y olvidame lo que ha sido,
si está mejor olvidado.