domingo, 17 de mayo de 2015

Late el aire

(Aire de cifra)

Más silencioso y aireado,
más tibio que el aire ahora,
el viento que me enamora
silba un son enamorado.
Ruge y el aire callado
en su silencio rugiendo,
anda llevando y trayendo
cien tropeles de azahares
que en heridas y pesares
dejan el cielo latiendo.

Y el cielo sin voz diciendo
la luz que la tierra aquieta,
con su mirada secreta
todo en su luz va pariendo.
El aire clama volviendo
en viento al laurel amante
y en sus ramas, navegante,
clava el canto un ave sola
que con el aire se inmola,
feliz, al aire fragante.