Llego a este punto, y con cierto pavor me parece que tendría que hablar de Merlín, de Gandalf, de la tradición, del Martín Fierro, del amor al prójimo, de Santo Tomás de Aquino y hasta de Simone Weil (a la que vengo esquivando...)
Pero no por separado, sino en cierto sentido de todo junto.
Mucho para un post, mucho para un blog.
Y mucho para mí, claro.
Hay que pensar. Y hay que intentarlo, de todos modos. Tal vez no de una vez, tal vez una serie.
En fin, me voy a meter en líos, pero allá voy.
'Dios primero' (bonita expresión de un amigo judío, cuando decía Dios mediante...)
Y 'nómbrese a Dios' (como decía un insigne tucumano, cuando daba comienzo a una tarea o un viaje...)