martes, 15 de septiembre de 2020

Soneto /XVI


Feliz desierto en soledad de arena;
travesía de luna hasta la orilla
espumosa de cielo y maravilla
donde se vuelve gozo toda pena.
Serenamente sol, alba serena,
tramo de viento, el corazón de arcilla
se modela en amor, flor y semilla
de una mirada que germina y truena.
Un desierto feliz, presente el aire,
mientras resuena con la voz presente
la presencia, su hondura, su donaire.
¿Quién ha llamado a esta extensión vacío?
Esta solemnidad que tengo enfrente
me es más todo que el mundo y su gentío.