miércoles, 9 de septiembre de 2020

Soneto /XII


Tierna de amar en vuelo, mi paloma,
dulce de arrullo, tibia de frescura,
ala de madrugada, suave y pura,
blancura y luz que con la luna asoma.
Tan sílaba y suspiro de tu idioma,
con la solemnidad de tu cintura
que germina en la flor de tu figura,
mis manos brotan de tu mismo aroma.
Vienes a mí, sembrada de infinito,
distante como el sol tu cercanía,
y el aire canta tu candor de cielo.
Ya puerto de tu abrazo, sueño; habito
contigo el palomar de tu alegría,
paloma mía, dueño de tu vuelo.