Dejemos que la noche sea secreta,que apenas llegue oculta en los susurros,que diga en luna las palabras mudasy prometa presencias más felices.Dejemos que la tarde transfigurecrepúsculos, con luz de advenimiento;que anuncie que las voces se aproximancon la primera estrella hasta la aurora.Dejemos al silencio acomodarsede vez en vez y voz en voz, callando,mientras el gozo estalla con estrépito.Dejemos para el viento la caricia.Dejemos que la espera nos espere.Dejemos todo. Hasta el dejar dejemos.