martes, 4 de agosto de 2020

La amada lejos


Me mirarán tus ojos, tan vestidos de mar;
perfumarás tu pelo que es la noche en jazmines;
tu voz irá encendida de ángeles serafines,
me adiestrará tu canto en tu arte de amar.
Te miro a la distancia que el tiempo nos ha dado.
La oliva de tus manos sutiles y morenas
da al aire las caricias que tú desencadenas
y a la distancia siento que estás a mi costado.
Miramos hacia el cielo por ver la misma luna,
pronunciamos requiebros que van con las estrellas
diciendo la presencia en esta lejanía.
Miramos y no vemos y no hay ausencia alguna,
porque hallamos en todo aromas y las huellas
por donde llegaremos hacia lo amado un día.