miércoles, 16 de agosto de 2006

Fiesta

Que ya no estamos en las edades en que el tiempo de fiesta y de trabajo a lo largo del año se repartía con beneficio para las celebraciones, no es una noticia.

Que se han reemplazado en todo el mundo los días santos por otras 'santificaciones' de profanidades, tampoco.

Que a este curso de las cosas la propia Iglesia le ha dado algún pie, no parece discutible.

Que entre los argentinos las cosas fueron de igual modo, es verdad.

Con todo eso, ya tendríamos para un discursete sobre la sacralidad del tiempo y la desacralización de la sociedad: orígenes y secuelas.

El caso es que, anoche, al final de una séance culturelle, con tristeza y furia indisimulada me pedía un amigo que mencionara aquí la cuestión. Con palabras -castellanas, eso sí- que bien puedo traducir gracias a mis buenos maestros en lenguas clásicas, casi me exigía -si es que no me estaba suplicando- que recordara de qué modo cuando en 1976 desaparecieron algunos feriados religiosos en el país, nadie dijo ni pío (algo poco pío, por cierto...), con el posible agravante -que yo mismo creo recordar, aunque no he podido documentar...todavía- de que por unos años se le quitó a la fiesta de la Asunción, por ejemplo, su calidad de fiesta de guardar y su consiguiente precepto.

Si así fue, lo fue hasta 1991 cuando, con un decreto general promulgado el 5 de julio de 1991, la Conferencia Episcopal Argentina fijó los días de precepto anuales. Muy bien.

Valiente cosa, en verdad, que además da para pensar en asuntos como el diálogo entre la Iglesia y el mundo...

Pero no es todo.

Como si hiciera falta -que no hace-, echemos una mirada a lo que pasó en unos 90 años en el país a este respecto.

Hay un Apéndice I sobre las Fiestas en un documento episcopal de 1902, que dice:
FIESTAS DE GUARDAR EN TODA LA REPÚBLICA

La Circuncisión de N. S. J 1 de enero
La Adoración de los Santos Reyes 6 de enero
La Purificación de Nuestra Señora 2 de febrero
La Fiesta del Patriarca S. José, único día de oír misa y trabajar 19 de marzo
La Encarnación de Nuestro Señor 25 de marzo
La Ascensión de Nuestro Señor Movible
Fiesta de Corpus Christi Movible
La Natividad de S. Juan Bautista 24 de junio
San Pedro y San Pablo 29 de junio
La Asunción de Nuestra Señora 15 de agosto
Santa Rosa de Lima 30 de agosto
La Natividad de Nuestra Señora 8 de septiembre
Todos los santos 1 de noviembre
La Inmaculada Concepción de Nuestra Señora 8 de diciembre
La Natividad de N. S. Jesucristo 25 de diciembre
Entretanto, para aquel decreto de 1991 que menciono, y que es el que rige hoy entre los católicos argentinos, los fiestas de precepto son:
1- Todos los Domingos del año.
2- 1º de Enero: Solemnidad de Santa María Madre de Dios.
3- 15 de Agosto: Solemnidad de la Asunción de la Santísima Virgen María.
4- 8 de Diciembre: Inmaculada Con­cepción de María.
5- 25 de Diciembre: Natividad de Nuestro Señor Jesucristo.
La incorporación de los 'domingos' -que no figura en 1902- tiene su flanco. Aunque podría tener su explicación, corrido el tiempo y sus circunstancias, tal como corrieron.

Sin embargo.

Me quedan algunas tareas para el hogar.

Por ejemplo, confirmar si durante unos 15 años, la Fiesta de la Asunción no fue entre nosotros fiesta de guardar, como creo recordar (y mi celoso amigo remarca con furia...)

Pero, además, me queda pensar si la calidad de aquella santificación del tiempo que aparece en el documento de 1902 tiene alguna relación -incluso causal- con lo que vino a ocurrir 90 años después, ejercicio que bien podría hacer mirando más lejos hacia atrás. Y algunas otras cosas de este tipo.