En esto estamos.
Somos un cuento de hadas.
El bosque a media tarde, la luz en las espigas.
La presencia y el abrazo en un manantial de silencios.
Somos un cuento de hadas,
el murmullo entre las hojas y el sol en el camino.
Somos sin tiempo,
somos las puras estrellas de la noche,
somos cada palabra.
En esto estamos.
Como un vendaval rugiente y subterráneo
desde el principio de todo,
por encima del cielo,
debajo de las piedras,
recostado en los surcos sin semilla:
un vendaval de amor que espera que su hora ya florezca.
Se resquebraja el mundo de los muertos
asolando las sombras de los vivos.
Crece el humo de los días,
el humo acre que desespera,
el humo que hiere las miradas,
el humo sin sosiego,
sin futuro.
Pero estamos en esto.
Y somos un cuento de hadas
y el murmullo entre las hojas y el sol en el camino.
