miércoles, 6 de julio de 2022

Esperanza de una mujer


¿Quién te podrá quitar esa sonrisa?
¿Qué noche? ¿Qué tormenta? ¿Qué desierto?
¿Qué soledad de mí y a campo abierto?
¿Qué pena fantasmal, gris, imprecisa?
¿Qué lágrima de sal? ¿Qué llanto incierto?
¿Qué angostura? ¿Qué riesgo? ¿Qué cornisa?
¿Qué furia en vendaval que el cielo avisa?
¿Qué naufragio de sol? ¿Qué mar sin puerto?
Nada, mujer, a ti nada te alcanza.
Es tan honda tu altura y tan segura
que no hay raíz que en ti no haya crecido,
como crece en tus centros la esperanza,
que vuelve más hermosa tu hermosura,
y que por ti en amor he conocido.