sábado, 12 de agosto de 2023

Romancillo para C. (III)


Ésta es la senda, mujer,
aquí principió el camino:
aquí anudamos los pasos:
ya no son tuyos ni míos.
Este sendero, mujer,
nos lleva al puente del río
y va montando las lomas
por laderas donde el trigo
irá a la tierra en septiembre
cuando florezcan tus lirios.
Este camino, mujer,
donde tu amor ha nacido,
tiene el color de la tarde
y el aroma del rocío
y está bordeado de lunas
y de conciertos de mirlos
y tiene un mallín que teje
alfombras de trébol tibio
que son lecho de la siesta
en los días de sol limpio,
bajo un aromo plateado
que es todo flor y zumbidos.
Esta vereda, mujer,
me sabe a amor y a destino:
por ella voy a tus brazos,
y por ella estás conmigo.