miércoles, 24 de septiembre de 2014
Ex clavitud
Un clavo saca otro clavo.
De mozo nunca me gustó la frase. Ni la usaba.
Pero hay que ver también que, siendo jóvenes -y por serlo-, entendemos poco y mal esa equivalencia aparente entre un clavo y otro.
Si, tantos años ha, alguien me hubiera dicho que, un día, las cosas y la vida me descubrirían y podría saborear el arcano feliz de esa misma frase, no se lo habría creído y hasta lo habría mirado con fastidio y hasta con cierto desprecio.
Y habría hecho muy mal.
Porque la frase lleva una verdad feliz.
Un clavo saca otro clavo.