Todas las novias cuidan la flor de las palabras;abriendo los latidos.Ah, corazón que nace entre las albasasombrando las calles y los pueblos.Ah, corazón que nace entre las albascorazón de las novias arrobado de estrellas.Aún la primavera tiene cielosy los ojos milagros,aún bajo las nubeshay mujeres y novias;y sus manos aprietanel amor en la paz que duerme entre los sueños.Aún las novias cantany recogen el habla de sus cantos;y las glosas antiguasse vuelven en el llantocon las cosas de siempre verdes de primaverade soledad y mundo.Jacobo Fijman
(De Romance del vértigo perfecto)
En el mundo hay –siempre ha habido– verso y poesía.
Si no lo dije una vez, lo dije mil: no es lo mismo. Para escribir versos basta saber contar o tener un poco de oído. O no completar renglones, para que parezca poesía.
Pero esto de Fijman es poesía, en verso.