martes, 21 de diciembre de 2021

Cortejo y ruiseñores


Adivinos de besos y colores,
sueñan silencios del ramaje oscuro
a canto limpio en su limón maduro,
con su fiesta de amor, los ruiseñores.
Tímida hembra de ese macho puro,
desdeña los requiebros y las flores
y a su canto se rinde y sus ardores
vuelan a él temblando, desde el muro.
Oigo su voz que cimbra de amorosa
y él su aleteo enciende, y una rosa
con lágrimas de sangre los festeja.
Oigo mi voz en esa dulce queja
y, de pronto, a mi lado, rumorosa,
crece una voz en flor que me corteja.