lunes, 11 de octubre de 2010

Palomar

...noche en el ancla, frío en la paloma...

Soneto N° 5.
Augusto Falciola




Por la noche sin luna de tu pelo
y los ojos de mar que te iluminan,
palomas, que a mi mano peregrinan,
de tu risa a tu voz están al vuelo.
Ya nacen a mi vera, a ti me inclinan
y navegan por mí. Van rumbo al cielo.
Ya en la nave sin ancla y sin desvelo
palomas timoneles me culminan.
Me abrigo en palomares y a su abrigo
conquisto soledades y, conmigo,
te busco por murmullos que dejaste.
Y en cada arrullo, cada tarde, siento
mi sangre de torcaz que vuela al viento
y el tibio palomar que me labraste.