Fue para marzo de 2009, como dice la noticia que introduce este segundo
Cuaderno.
El escrito se refiere a la belleza -y a la Belleza- y aplica las reflexiones a asuntos escatológicos. Y eso en razón de que fue compuesto para exponerse en unas
Quaestiones quodlibetales in spectatione Christi, que se debatieron en esa fecha en Nogoyá, convocadas por el magnánimo y magnífico anfitrión de aquello, que fue Federico Mihura Seeber.