lunes, 4 de diciembre de 2006

Marca

La parte de 'liberación' es bastante transparente. No digo 'clara' ni consistente. Es a lo que más se dedican, en realidad, sea lo que fuere que quiera decir 'liberación'.

Lo de 'teología' es lo que no entiendo.

¿Para qué usarla? No digo que no se pueda o no se deba. No digo nada. Digo solamente por qué les parecerá que tienen que usar la palabra. Qué cosa se supone que designan con la denominación.

Tal vez la palabra 'teología' les despierte quién sabe qué imágenes. Tal vez crean que si aparece la palabra 'teología' eso les da quién sabe qué prestigio o halo (lo que no deja de ser llamativo) o crean que 'liberación' sola es poca cosa o que 'sociología de la liberación' suena bien pero es medio como poco. O que hay que redefinir 'teología', resemantizarla. Pero aun en este último caso -y especialmente si de eso se tratare-, para qué pelearse por una palabra, para qué seguir usándola.

Tal vez sea una 'marca', la marca de un producto.

(Así como otros usan la palabra 'tradición'.)

Lo que pienso es que mientras no lo digan claramente, mientras no expliquen qué necesidad tienen de la palabra 'teología', seguirá siendo una manipulación.

Me hacen acordar, además, a Alvaro Alsogaray: imperturbable -salvo el tic- sostenía que los 'liberales' nunca habían gobernado el país. Cuando se le decía que fulano, que mengano, que tal gobierno, que tal ministro (sobre todo si habían fracasado, hambreado, expoliado): 'eso no es liberalismo, el liberalismo bien entendido y bien practicado no es eso y jamás haría eso...'

Farabutes.