jueves, 18 de octubre de 2018

Del arrullo simiente


como la voz de la paloma cuando
nos llega enamorada la paloma

De la sabrosa entrega, Leopoldo Marechal


Vi un derredor sembrado de tu arrullo,
cielos de lino, surcos como heridas
sangrando las espigas prometidas,
y más promesas, todas en capullo.
Todo en capullo en ti, todo en capullo:
ya en tallo las caricias florecidas
que me labran las manos sorprendidas
y laboran al ritmo de tu arrullo.
Y va creciendo, amor, ya va creciendo
el mundo ajado que quedó muriendo
y revive, si la tibieza asoma.
Y tu arrullo de miel está cantando
como la voz de la paloma cuando
nos llega enamorada la paloma.