domingo, 2 de julio de 2017

Del amor sin tiempo


Cuando todo haya sido
Cuando el tiempo sea todo pretérito perfecto
Cuando ya no haya nadie
Cuando pierdan sus hojas los árboles y el agua
sea sólo un recuerdo en los ríos del mundo
Cuando el cielo no tenga ni sol ni estrellas, nada;
y el campo sea sólo un aroma inhallable:

Todavía mi mano te estará acariciando
mirándote mis ojos
besándote mi boca.

En el mismo lugar donde estamos ahora.

Con un amor más viejo que la historia de todo.
Con un amor más joven que lo que aún no ha sido.




Estos versos han vivido décadas ya. Nacieron a principios de los '90. Siempre anduvieron anónimos, porque así era la condición que un servidor les había impuesto. Hasta ahora.

Sé que recorrieron una parte de este mundo, más allá del mar. Y que llevaron alguna alegría a los corazones. Y me alegra.

De cómo nacieron, en qué circunstancias misteriosas y felices, tal vez tendré que hablar alguna vez. Que no es esta vez.