jueves, 3 de mayo de 2012

Malhaya mayo si falla

Y así arranca: fallando su destino de niebla de otoño y humo de madera.

No le hace.

Cosas hay en este mundo, mientras.

Ahí lo tenemos a Aragón mirando con recelo a los refundadores de la patria en La tradición y su sombra y mirando con simpatía otras raíces que están más hondas y son más fuertes en Los buenos cimientos.

Una vez más San Martín, en una semblanza de su ocaso de destierros hasta que Llegó la noche a las tres de la tarde.

Y me voy con Hasta que el silencio se hizo total. Porque poesía no puede faltar, claro. Y uno de sus preferidos, tampoco: Enrique Banchs.