jueves, 17 de septiembre de 2009

Lluvia de septiembre



Como todo el mundo sabe, y según se mire, septiembre bien puede ser marzo. Y viceversa.

Y así es como la primavera es el otoño, según se vea, porque a veces septiembre es un otoño y marzo una primavera. Y viceversa.

Entonces, mientras por ejemplo el norte y el sur levantan sus emblemas de hojas secas o brotes renacidos, disputándose las primicias de la vida y de la muerte, creo que definitivamente lo mejor es un madrigal.

Algo que, al menos por unos tres minutos, aplane las diferencias entre una cosa y otra y haga olvidar las distancias entre lo que se apaga en marzo y lo que estalla en septiembre. Y viceversa.

Y estoy seguro de que lo mejor es un madrigal de un mes neutral. Digamos mayo, por ejemplo.

Un madrigal de lluvia de mayo, ahora que llueve en septiembre.

Algo que suene tan amablemente meláncolico como un otoño de septiembre. O como un zorzal de septiembre.

Ahora que cantan los zorzales. Porque es septiembre. Y llueve. Como si fuera otoño.