sábado, 22 de septiembre de 2007

Los secundarios (II): Larga vida a Gollum

Veamos, en las historias de John R. R. Tolkien, el caso de cierta longevidad, efecto asociado al poder del Anillo, que es, en un sentido, asunto colateral al que estoy diciendo, pero que en otro sentido es central.

En 1600 de la Segunda Edad, Sauron forjó el Anillo para dominar a los otros 19 Anillos de poder, en cuya forja también intervino entre 1500 SE y el 1590 SE y que fueron repartidos entre hombres (9), enanos(7) y señores elfos (3).

Hacia el 3441, año en que termina esta Segunda Edad, Isildur -durante la guerra- corta el dedo de Sauron quien así pierde el Anillo. Poco después, en el año 2 de la Tercera Edad, el desastre de la batalla de los Campos Gladios es también el momento en que el Anillo desaparece de las manos de Isildur -que muere junto con sus tres hijos- y va a parar al río Anduin donde permanece oculto hasta que Déagol lo encuentra mucho más tarde.

Veamos ahora lo que respecta a los hobbits. El temible Anillo único fue finalmente encontrado (tal vez por voluntad del propio objeto) por Déagol -su nombre era Nahald-, allá por 2463 de la Tercera Edad, mientras pescaba con su primo Trahald, es decir, nuestro Sméagol. Esto quiere decir que el Anillo estuvo 2.461 años oculto.

Para quitárselo, Sméagol mata a su primo y por los siguientes 478 años tiene al Anillo en su poder (o al revés, por mejor decir...) hasta que lo pierde (o el Anillo lo deja...) en el 2941 TE.

Allí es cuando lo encuentra Bilbo, que lo tendrá consigo hasta que en el 3001 TE se lo dará a su sobrino Frodo, quien lo cargará hasta el episodio de la Grieta del Destino, en 3019 TE, cuando Trahald-Sméagol-Gollum, en su codicia y desesperación, se lo lleve con una parte de Frodo a las honduras flamígeras del Orodruin.

Sméagol nació en el 2430 TE y vivió hasta el 3019 TE, esto es 589 años, de los cuales, los 33 primeros nada supo del Anillo (Frodo tenía la misma edad cuando lo recibió, ambos en el día de su cumpleaños de mayoría de edad hobbit), así como los 78 últimos años de su vida penó por él, pues ya no tenía su 'tesoro'. El momento en que lo recuperó fue el mismo momento en que lo perdería para siempre y para siempre lo haría desaparecer.

Por su parte, Bilbo (2890 TE- ) y Frodo (2968 TE- ) llevaron el Anillo 60 y 18 años, respectivamente. Ambos marcharon hacia el Oeste en 3021 TE. Bilbo vivió 131 años (y ocho días, dicen las cuentas) en la Tierra Media, mientras que Frodo anduvo por allí sólo 53 años. La longevidad de Bilbo -más que sus aventuras- llegó a darle gran prestigio entre los hobbits.

El Anillo, haciendo cuentas, anduvo por la Tierra Media 4.860 años, desde que fue forjado hasta que desapareció definitivamente.

La mirada debería posarse sobre Trahald-Sméagol-Gollum. Y a su respecto uno podría hacerse aquella pregunta que se hacen muchos longevos que se sienten estirados en el tiempo (como manteca sobre el pan, dijera Bilbo): ¿por qué durar tanto?

Por supuesto que la respuesta puede asociarse inmediatamente a los efectos del Anillo sobre quienes lo cargan (exceptuando al propio Sauron, claro): el Anillo hace que el deterioro de los años se note menos mientras lo poseen y que su vida se estire languideciendo cuando no lo tienen consigo. Eso le pasó a Gollum y también a Bilbo. A Frodo, por su parte, comenzaba a notársele el efecto.

Sin embargo, si en el caso de Gollum cambiáramos la pregunta, apenas, la respuesta cambiaría substancialmente. Porque si Gollum se preguntara ¿para qué vivir tanto?, ya no estaríamos frente a lo que lo hace durar sino a la razón por la cual es preciso que dure, la finalidad.

Y es tan pertinente una pregunta como la otra, me parece. Y tal vez más importante la segunda que la primera.

O quizá me lo parece así porque eso me permite pasar al capítulo siguiente y referir entonces la casera doctrina sobre el extra o el personaje secundario.