jueves, 2 de junio de 2005

Sano esparcimiento

He aquí, señoras y señores, un ejemplo paladino de lo que son los medios de comunicación. Uno cualquiera, ni mejor ni peor. Y, más bien, innecesario.

Si quieren una visita guiada -pero, sobre todo, si no quieren una visita guiada-, deténganse sobre el tacho o bote (y... tengo que traducir...), y déjense conducir, desde la portada que aparezca tras leve toquecito, por las 8 salas propuestas allí; ellas les mostrarán no solamente qué hay para ver, sino cómo tienen que verlo y qué conclusiones deben llevarse a su caletre, para pensar el mundo exterior, el interior, y todos sus alrededores.

El experimento es completamente estólido, demasiado fatigoso y enteramente inútil. Incluso, diría, hay que tener una paciencia que mejor sería aplicarla a causa más provechosa, por lo que usarla en estas lides es sencillamente malgastarla.

Por eso mismo, no se lo pierdan. Es una verdadera estafa criminal.